jueves, 8 de marzo de 2012

El sexo fuerte

Es muy digno de admirar todo lo que en ti se compone, todo aquello que hace de ti una viva imagen de un núcleo tan esencial como tú. Tan admirable por tantas cosas, aunque por otros odiada e incluso temida, tú que eres tan importante como la viva y cálida luz del sol, tan necesaria que sin ti hoy nada sería lo que es tal y como lo conocemos. Gracias a ti hemos logrado grandes cosas ya desde el principio, aunque hayas tenido que aguantar tanto dolor y sufrimiento por aquellos en verdad te temen aunque traten de someterte, sin embargo no puedo ignorar la tristeza que en mi produce que hasta hace no mucho la mayor parte de población de nuestro mundo sea consciente de lo que puedes llegar a hacer. Tú, de apariencia delicada e inocente capaz soportar hasta la más devastadora avalancha, pues en ti hay una fuerza capaz de mover montañas. Siempre has sido considerada el sexo débil y sin embargo tu paciencia y tu templanza a hecho de ti un ser superior del que aprender y tomar ejemplo; luchadora hasta final, consiguiendo alcanzar los derechos que ya por naturaleza te pertenecen y que sin razones lógicas te han quitado desde el principio de los tiempos. Tan necesaria en la vida y tratada como cualquier envoltorio carente de importancia por aquellos que cegados por sus ansias de superioridad intentaron hacer de ti una simple mascota de compañía, y aunque ganaron batallas, al final fuiste tu quien logró la victoria en una guerra en la que en un principio todo se volvía contra ti. Has estado aguantando todo tipo de humillaciones y tú estás ahí de pie dañada por los tratos inmerecidos que te llevan acompañando desde siempre, y desafiante soportas el dolor de las laceraciones causadas por los abusos que el paso del tiempo ha llevado consigo. Tú que has heredado del diamante la belleza y la dureza. Tan necesaria en la naturaleza y hay quienes no saben todavía que el hacerte daño supone auto dañarse. Tú que a pesar de ser sometida tantas veces, es el hombre quien ha estado mayor número de ocasiones arrodillado ante ti. Aunque eres maltratada y sufres, sabes que estás por encima, pues por cada golpe que recibes es la humanidad y la dignidad del que lo asesta lo que se rompe. Por todo ello te admiro, has conseguido llegar a lo que te dejaron fuera de alcance luchando sin rendirte, pues es mejor guerrero aquel que se fortalece y aprende de sus derrotas que el que se jacta de la victoria fácil alimentado su arrogancia. Tú que eres tormenta y calma, tú que eres musa e inspiración, tú que eres mujer.

2 comentarios:

  1. Muy, muy bueno. Tenía que comentar en esta entrada, de verdad, me ha gustado muchísimo, estas entradas me superan ¡quégenial! :)

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